Kit, una artista fracasada, vuelve a vivir con sus padres y acepta un trabajo temporal en una agencia de relaciones públicas. En el trabajo, Kit conoce al vicepresidente, Gary, que es extremadamente torpe y hace insinuaciones inapropiadas.

Poco después de empezar, Kit recibe una misteriosa carta de "El Vendedor" que la invita a "La Tienda", que vende "lo que necesitas". Le ofrece cumplir su fantasía infantil de poseer un unicornio. Kit debe prepararse cumpliendo unos requisitos específicos en unos expedientes.

El primer expediente describe cómo proporcionar un recinto adecuado para el unicornio. Kit contrata a Virgil, empleado de una ferretería, para que construya un establo sin decirle para qué. Pronto empiezan a hablar y a pasar tiempo juntos. El segundo expediente le dice a Kit que debe prepararse para alimentar al unicornio. Kit y Virgil compran heno en un viaje de un día juntos y siguen conociéndose.

Gary le ofrece a Kit la oportunidad de presentar una propuesta de marketing de aspiradoras. Durante este tiempo, Kit recibe el siguiente expediente y se entera de que debe ser capaz de rodear al unicornio de un entorno cariñoso, pero se da cuenta de que su mala relación con sus padres se lo impide.

El fin de semana Kit debería estar preparando su presentación de trabajo, pero se va de excursión a la selva "Emotion Quest" con sus padres, enfrentándose a ellos durante el tiempo del "círculo de la verdad", lo que lleva a una discusión familiar. Acaban discutiendo, lo que aumenta las tensiones entre ella y sus padres.

Una vez que Kit vuelve a casa, encuentra la inspiración para su presentación y trabaja toda la noche. El siguiente expediente dice que debe demostrar que puede mantener económicamente al unicornio.

La extravagante presentación de Kit no es bien recibida por los ejecutivos de la empresa, que la observan en silencio. Por unanimidad, optan por una presentación diferente, utilizando una atractiva modelo. Kit deja su trabajo. En una cita con Virgil, éste le pide que le revele el secreto de la finalidad del establo. Kit le habla de la tienda de unicornios, llevándole hasta ella, sólo para descubrir que ha desaparecido. La confusión de Kit se convierte en ira al sentirse traicionada. Virgil se preocupa y le dice que la han estafado, pero le asegura que no cree que esté loca. Kit sale enfadada, dejando a Virgil de pie, donde ve un poco de heno en el suelo.

Kit renuncia a su sueño de tener un unicornio y tira todo su arte y sus materiales. Después de un momento de curación con su madre, Kit intenta acercarse a Virgil, visita su tienda, pero es incapaz de ponerse en contacto con él. Deja un mensaje de disculpa en su buzón de voz y más tarde descubre que Virgil ha terminado el establo, decorándolo con las obras de arte que ella había tirado.

El vendedor llama para decirle a Kit que el unicornio ha llegado. Cuando ella duda, el vendedor le dice que hay otro esperando si Kit no lo recibe. Virgil insta a Kit a no ir. Desanimada, Kit dice que si no va, siempre se preguntará. Cuando llega, Kit descubre que el unicornio está allí. Habla con el unicornio, agradeciéndole que haya estado ahí para ella cuando nadie más lo estaba, y finalmente consigue cerrar el círculo. Decide no llevarse el unicornio y lo deja para el siguiente cliente. Virgil entra y también ve el unicornio. Se van de la mano, asombrados por todo lo que acaban de vivir.