En 1907, una joven inglesa, Lucy Honeychurch (Helena Bonham Carter), y su prima solterona y acompañante, Charlotte Bartlett (Maggie Smith), se alojan en la Pensione Bertolini durante sus vacaciones en Florencia. Están decepcionadas porque sus habitaciones no tienen vistas al Arno, como les habían prometido. Durante la cena, conocen a otros huéspedes ingleses: el reverendo Beebe (Simon Callow), dos hermanas solteronas de edad avanzada, las señoras Alan (Fabia Drake y Joan Henley), la escritora de novelas, Eleanor Lavish (Judi Dench), el librepensador Sr. Emerson (Denholm Elliott) y su apuesto hijo filósofo, George (Julian Sands).

Al enterarse de los apuros de vista de Charlotte y Lucy, el Sr. Emerson y George se ofrecen a intercambiar habitaciones, aunque Charlotte considera la sugerencia poco delicada. El Sr. Beebe media y el cambio se realiza. Mientras recorre la Piazza della Signoria al día siguiente, Lucy es testigo de cómo un hombre del lugar es brutalmente apuñalado. Se desmaya, pero George Emerson aparece y acude en su ayuda. Cuando Lucy se ha recuperado, los dos tienen una discusión personal antes de volver al pensione.

Más tarde, Charlotte, Lucy y los Emerson se unen a otros turistas británicos en una excursión de un día a la campiña de Fiesole. Charlotte y Eleanor Lavish entablan una conversación considerada "inapropiada" para las jóvenes, por lo que Lucy va en busca del Sr. Beebe. En su lugar, el conductor italiano la lleva por error hasta donde George está admirando la vista desde una ladera. Al ver a Lucy, la abraza de repente y la besa apasionadamente. Charlotte aparece e interviene. Preocupada por que la madre de Lucy la considere una carabina inadecuada, Charlotte jura a Lucy guardar el secreto y acorta su viaje.

Al regresar a Surrey, en Inglaterra, Lucy no dice nada a su madre sobre el incidente y finge olvidarlo. Pronto se compromete con Cecil Vyse (Daniel Day-Lewis), un hombre rico y socialmente prominente que es snob y pretencioso. Cecil ama a Lucy, pero él y su madre consideran a la familia Honeychurch como sus inferiores, lo que consterna a la señora Honeychurch. Lucy no tarda en enterarse de que el Sr. Emerson se muda a la casa de campo alquilada por Sir Harry Otway, con George de visita los fines de semana. Lucy tenía la intención de que las dos señoras Alan vivieran allí y se enfada con Cecil al enterarse de que a través de un encuentro casual con los Emerson en Londres, Cecil les recomendó la casa de campo. Proclama que su motivo era molestar a Sir Harry, a quien Cecil considera un esnob, y cree que los Emerson les parecerán "demasiado comunes".

La presencia de George trastorna la vida de Lucy, y sus sentimientos reprimidos por él salen a la superficie. Mientras tanto, el hermano de Lucy, Freddy (Rupert Graves), se ha hecho amigo de George. Freddy invita a George a jugar al tenis en Windy Corner, la casa de los Honeychurch, durante lo cual Cecil lee en voz alta y de forma burlona la última novela de Miss Lavish ambientada en Italia. Cecil, que sigue leyendo, no se da cuenta de que George besa apasionadamente a Lucy en el jardín. Mientras Cecil sigue leyendo en voz alta, Lucy reconoce una escena idéntica a su encuentro con George en Fiesole. Se enfrenta a Charlotte, que admite habérselo contado a Miss Lavish, que lo utilizó en su historia. Lucy ordena a George que abandone Windy Corner y no vuelva nunca más. Le dice que Cecil sólo la ve como una posesión y que nunca la querrá por sí misma, como haría él. Lucy parece no inmutarse, pero poco después pone fin a su compromiso con Cecil, diciendo que son incompatibles. Para huir de las consecuencias, organiza un viaje a Grecia con las señoras Alan. George, incapaz de estar cerca de Lucy, hace que su padre se traslade a Londres, sin saber que Lucy ya no está comprometida. Cuando Lucy pasa por la casa del Sr. Beebe para recoger a Charlotte, se encuentra con el Sr. Emerson, que está allí. Finalmente se da cuenta de sus verdaderos sentimientos por George. Al final, los recién casados George y Lucy pasan la luna de miel en la pensión italiana donde se conocieron, en la habitación con vistas al Duomo de Florencia.