Final de ¡Vaya un fugitivo!
(1998)
Final de ¡Vaya un fugitivo! (1998)
"No es sólo una película. Es todas las películas"
Título original: Wrongfully Accused
Sinopsis
Ryan Harrison, un virtuoso del violín idolatrado por el público, es seducido por la bella y enigmática Lauren Goodhue, que lo implica en el asesinato de su marido, un gran magnate, por lo que es detenido y condenado a muerte. Durante el traslado a la cárcel donde será ejecutado, la furgoneta resbala sobre una piel de plátano, y Ryan logra escapar. Se convierte así en un fugitivo que es perseguido sin tregua por un incansable sabueso, el teniente Fergus Falls. Lo malo es que Ryan sólo dispone de 80 minutos para resolver el crimen y demostrar su inocencia.
Pat Proft
Director
Glen MacPherson
Fotógrafo
Bernd Eichinger
Productor
Reparto principal
Leslie Nielsen
Richard Crenna
Michael York
Melinda McGraw
Kelly LeBrock
Aaron Pearl
Como acaba ¡Vaya un fugitivo!
Ryan (Leslie Nielsen) salva al Secretario General de la ONU McKintyre (Gerard Plunkett) de Lauren (Kelly LeBrock) y Sean (Aaron Pearl) y su grupo de "luchadores por la libertad", y luego los mariscales de EE.UU. - liderados por el teniente Falls (Richard Crenna) - llegan y arrestan a los antagonistas.
Antes de llevarse a Lauren y a sus hombres, Falls le dice a Ryan que, en efecto, ha sido acusado injustamente de asesinar a Hibbing Goodhue (Michael York) (aunque nunca se explica por qué Lauren hizo que Sean matara a Hibbing, o cuál era la conexión de Hibbing con McKintyre).
Ryan y Cass (Melinda McGraw) van juntos a un crucero, donde mientras imitan la icónica escena del Titanic en la proa del barco, sus cabezas golpean un puente bajo, dejándolos inconscientes.