Final de Stranger Things 2ª temporada

(2016)
Final de Stranger Things 2ª temporada
"Un verano puede cambiarlo todo."

Título original: Stranger Things

15/07/2016 (ES)Sci-Fi & Fantasy, Misterio, Drama
Dónde ver la serie Stranger Things online

Sinopsis

A raíz de la desaparición de un niño, un pueblo desvela un misterio relacionado con experimentos secretos, fuerzas sobrenaturales aterradoras y una niña muy extraña.

Matt Duffer

Director

Kyle Dixon

Compositor

Rand Geiger

Productor

Reparto principal

Winona Ryder

Winona Ryder

David Harbour

David Harbour

Finn Wolfhard

Finn Wolfhard

Millie Bobby Brown

Millie Bobby Brown

Gaten Matarazzo

Gaten Matarazzo

Caleb McLaughlin

Caleb McLaughlin

Como acaba Stranger Things

La segunda temporada de Stranger Things, con sus esfuerzos por reavivar la profundidad emocional de la temporada anterior, no sólo ha continuado, sino que ha recreado el criterio con el que se pueden medir y evaluar los elogios recibidos.

La segunda temporada de Stranger Things, una fascinante secuela de la serie de culto de Netflix, está repleta de nuevas revelaciones, atrevidos giros de los acontecimientos y desgarradores cierres. Sin embargo, las extensas narrativas están expertamente tejidas con los hilos del miedo, el poder y la amistad, cuya reiteración y reinvención han dirigido con éxito la serie hacia el camino del éxito inevitable. La serie ha seguido desentrañando los misterios que se habían acumulado en la primera temporada de Stranger Things, para terminar con el regreso de Will Byers y el consiguiente reencuentro de la amistad y la familia.

Representación del miedo


Al igual que su predecesora, la segunda temporada de Stranger Things es un tesoro de innumerables arcanos que bordean las complejidades de los experimentos del Laboratorio Hawkins, además de desvelar la identidad y los objetivos de las criaturas que acechan en el Upside Down. Will Byers adquiere un papel predominante en la pantalla, esta vez cuando sus amigos y familiares hacen numerosos intentos por comprobar la veracidad de sus recurrentes alucinaciones, sólo para que los personajes y los espectadores se den cuenta de la sórdida realidad de sus visiones. En este sentido, la serie ha retratado meticulosa y asiduamente un tema clave: el miedo.

Es omnipresente la representación de una agobiante sensación de "miedo" a lo largo de la temporada, cuya representación se asegura a través de profundos presentimientos de diversas maneras. Estas temerosas aprensiones y premoniciones se entremezclan profundamente con las narrativas concurrentes y son perceptibles para el público en numerosos escenarios. Entre ellos se encuentran los flashbacks del pasado de Eleven junto con su viaje en solitario de autodescubrimiento, el viaje de Will entre los mundos alternativos del mundo actual y el "Upside Down" envuelto en visiones premonitorias, y un ataque de los Demodogs que provoca una apasionante escapada, por nombrar algunos.

Los sucesos de Hawkins se desarrollan en un sórdido telón de fondo; algunos de los símbolos en este sentido son las tierras áridas, la falta de rasgos urbanos por excelencia y el incidente de las calabazas podridas, por nombrar algunos. Sí, además de los episodios mencionados anteriormente, la serie ha delineado escrupulosamente la representación del miedo a través del propio escenario geográfico (Hawkins). La continuación de esta práctica, desde la temporada anterior, está salpicada de intrincadas líneas argumentales, numerosas subcapas de complejidades y un aumento del crecimiento de los personajes.

Mind Flayer - El monstruo de las sombras simboliza la megalomanía


El capítulo 8 de la segunda temporada de Stranger Things y el decimosexto episodio de la serie introduce la identidad del formidable antagonista, un monstruo arácnido con tentáculos que, a lo largo de la temporada, se ve rondando a Hawkins, petrificando a Will y creándolo como un recipiente para proceder a sus misiones de eliminación del mundo humano. La criatura ha sido bautizada con el nombre de "Mind Flayer", una criatura imaginaria que deriva su bautizo en la serie de "Dragones y Mazmorras", una de las principales actividades de juego entre los niños. La característica intrigante del monstruo de las sombras, también conocido como Mind Flayer, aparte de su naturaleza amorfa, es su marcada diferencia con respecto a un antagonista estándar que radica en la incapacidad de comprender su propósito. En el episodio, el racismo sirvió como explicación plausible para entender su propósito. El "Destructor de Mentes" era considerado la "raza superior" que pretendía conquistar a los humanos (las razas subordinadas). Además de la teoría propuesta, una visión panorámica de las acciones del "Mind Flayer" nubla la especificidad de sus intenciones envolviéndolas en el misterio y haciéndolas abiertas a diversas interpretaciones al final de la segunda temporada de Stranger Things.

La confusión forzada entre los espectadores sobre el Exterminador de la Mente ha sido respondida por el coproductor de la serie, Mark Duffer, que habló en detalle a Entertainment sobre este tema: "Hay una especie de enfoque de H.P. Lovecraft, este ser interdimensional que está más allá de la comprensión humana". La cuestión que se plantea es la de cuáles son los rasgos esenciales que posee el Asesino de la Mente para que se le califique legítimamente de "megalómano". La conjetura satisfactoria a este respecto está contenida en las respuestas a la pregunta que se fundamenta en la especulación de que la entidad lleva a cabo la misión de una "raza superior". En otras palabras, si las intenciones del Matamentes radican en conquistar y arrasar con las razas subordinadas (los humanos), entonces es un estratega ejemplar y un manipulador agudo.

La criatura ha controlado psíquicamente a todas las entidades del Upside Down, desde los Demodogs hasta los zarcillos, así como a su antigua víctima, Will Byers, que formó sus ejércitos y se convirtió en cómplice de la consecución de sus objetivos, uno de los cuales fue vengarse de los trabajadores del laboratorio Hawkin, cuyos intentos de incendio fueron terriblemente correspondidos. A lo largo de todo el proceso, el Destructor de Mentes se ha proyectado como una entidad que tiene el potencial de poseer, destruir, incitar al miedo y crear cómplices redudables para cumplir sus incomprensibles intenciones, lo que lo hace elegible como metáfora de dictadores asesinos y ávidos de poder con una inclinación por controlar y extender sus límites territoriales. El verdadero sentido de su megalomanía radica en su percibida inmortalidad e indestructibilidad, retratada al final de la serie, cuando la criatura se muestra asomándose a la versión "del revés" del instituto Hawkins.

La amistad como 'final feliz'


La segunda temporada de Stranger Things tiene un "final feliz" muy deseado con las apasionantes luchas y los misterios que se desarrollan y que culminan con la "bola de nieve", confirmando la restauración de la inocencia de la infancia y el tan esperado reencuentro entre Mike y Eleven. La amistad se reavivó y redefinió en esta temporada y sirvió de eficaz catalizador para desentrañar el secreto sobre el "Mind Flayer", ya sea en forma del envidiable bromance entre Steve y Dustin o del reclutamiento de "Mad Max" en el cuarteto.

Los restos de la amistad de la infancia se pueden discernir en forma de los paralelismos que se establecen entre la revelación sobre el Exterminador de la Mente y los Demodogs y el juego de "Dragones y Mazmorras", al que los chicos juegan con frecuencia. Desde la resolución de los complejos secretos hasta la lucha colectiva contra los demodogs, la segunda temporada de Stranger Things revela la profundidad emocional de los personajes y sus respectivas inversiones emocionales en cada intento de descubrir la verdad. La mayor eficacia de la amistad entrelazada con la inocencia de la infancia desempeñó un papel fundamental en la resolución.